Halloween is coming... ¡Cheesecake de calabaza!

¡Hola a todos!

Halloween está casi aquí y ya sabéis cuantísimo me gusta esta celebración norteamericana, por lo que un año más quiero traeros una nueva propuesta dulce hasta el blog para celebrarlo por todo lo alto.

Así que aquí os presento a esta espectacular tarta de queso y calabaza especiada, con una deliciosa base de galletas oreo y una cubierta irresistible de telaraña hecha con chocolate con leche al caramelo y chocolate blanco. Suena bien verdad? ¡Pues de sabor está increíble!

La receta es muy parecida a ésta de Good Food, aunque cambié la base y la cobertura y ajusté un poquito las cantidades del relleno para no hacerla tan dulce al ponerle la cobertura de chocolate.

Es muy sencilla de hacer, y se mancha poquito, porque el relleno de la tarta se hace en un sólo bol... ¡rápido y fácil, vamos allá con la receta!

Ingredientes para un molde de 20-25 cm:
       
Para la base:
190 g de galletas tipo Oreo
60 g de mantequilla derretida

Para el relleno:

450 g de queso crema
340 g de calabaza cocinada al vapor
200 g de azúcar
1 cucharadita de canela en polvo
1/2 cucharadita de nuez moscada
4 huevos

Para la cobertura:

15 onzas de chocolate con leche al caramelo Valor
30 g de chocolate blanco

Preparación:

1. Comenzaremos preparando la base, para ello sólo tendremos que triturar bien las galletas oreo y mezclarlas con la mantequilla derretida. Ponemos esta mezcla en la base del molde, mejor si éste es desmontable y lo engrasáis y forráis la base con papel vegetal, así la tarta saldrá sin ningún tipo de problema. Distribuimos bien la mezcla con las manos y llevamos a la nevera mientras preparamos el relleno.
2. Precalentamos el horno a 150ºC. En un bol amplio ponemos el queso crema, la calabaza, el azúcar, la canela, la nuez moscada y los huevos y batimos todo bien con las varillas eléctricas, unos cinco minutos hasta que esté todo bien mezclado y espese un poquito. Ponemos la mezcla en el molde y horneamos durante 90 minutos (calor arriba y abajo, parte media del horno).
3. Dejamos la tarta enfriarse en el molde encima de una rejilla metálica, tiene que estar completamente fría cuando la vayamos a decorar.
4. Para la cobertura, derretimos primero el chocolate con leche al caramelo y lo ponemos por toda la superficie. Dejamos que se enfríe para que se solidifique, pero no del todo, que esté aún un pelín blando. Podemos acelerar este tiempo metiéndola en el congelador unos minutos.
5. Ahora derretimos el chocolate blanco y lo colocamos en una manga pastelera sin boquilla o bien una bolsa de congelar y hacemos una espiral comenzando en el centro de la tarta. Ahora cogemos un palillo o palito de brocheta y comenzando desde el centro trazamos líneas un pelín curvadas, hacia el exterior, como si estuviésemos dibujando los radios de una rueda. ¡Y ya está, lista para disfrutar!

Habéis visto qué fácil? Tenéis que animaros a probarla porque está muy muy rica y sé que os va a encantar :)

El chocolate con leche al caramelo de la cobertura es del genial lote que me mandaron desde Chocolates Valor, tenéis que probarlo porque está increíble y tiene muchísimas posibilidades para incorporarlo en nuestras recetas. Hoy decidí usarlo como parte de la cobertura, pero ya tengo en mente darle todo el protagonismo y convertirlo en el ingrediente estrella de algún postre.

Aprovecho para agradecerles de nuevo este detallazo que han tenido conmigo, estoy encantada con mi lote, aunque tengo que decir que es todo un peligro, porque aunque el chocolate es especial para derretir y ponerlo en nuestros postres, sólo está buenísimo, y la mitad que no utilicé para esta receta me la ventilé de una sentada casi sin darme cuenta :D ¡El toque a caramelo que tiene es muy pero que muy especial! (¡Y totalmente adictivo!)

¡Espero que os haya encantado! Esta semana tendréis otra recetita más para Halloween, aunque si queréis ir abriendo boca con más ideas, podéis ir echando un vistazo al resto de recetas terroríficas que ya he hido publicando haciendo clik aquí.

¡Nos vemos enseguida, un abrazo!