Red Velvet Cake

Hola a todos!

¿Qué tal de fin de semana?

Yo tengo en el horno un cono de pizza y mientras se hace aprovecho para enseñaros la Red Velvet Cake que preparé esta mañana. Esta tarta se caracteriza por presentar densas capas de bizcocho de vainilla con un toque de cacao. Entre sus ingredientes encontramos buttermilk y vinagre, que al reaccionar hacen que afloren los pigmentos rojos del cacao, aunque es un toque muy sutil, y en la actualidad se utilizan colorantes para darle ese color rojo intenso y tan característico.

Si recordais, en mi post sobre el pedido que realicé a Club Cocina os comentaba que me había hecho con un preparado de Duncan Hines para hacer Red Velvet Cake. El paquete incluye los ingredientes secos y nosotros tenemos que añadirle aceite, tres huevos y un poco de agua.

Hay que batir todos los ingredientes con las varillas eléctricas durante unos 4 minutos y ya está! Es una tarta totalmente express.

Cuando eché el preparado en el bol, me asusté un poco porque era marrón clarito, igual que colacao, y pensé: "verás, esto viene confundido y es una tarta de chocolate". Pero en cuanto le añades los ingredientes húmedos se torna de un rojo pasión intensísimo! Es una pasada!

Realmente disfruté como una enana preparándola, porque desde hace mucho tiempo tenía una curiosidad tremenda por probar una Red Velvet, y sé que esta tiene trampa, pero es que no me pude resistir cuando vi el preparado, aunque eso sí, os prometo que la prepararé algún día de forma casera, y muy probablemente en forma de cupcakes.

Para hornearla utilicé dos moldes de 20 cm y el problema que tuve fue que se abombó bastante en el horno, por lo que tuve que recortar la parte abombada con un cuchillo para que quedase bien planita.

Utilicé el clásico frosting de queso y vainilla siguiendo la receta que viene en el libro Tartas a Gogó. Mezclé en un bol 450 g de azúcar glas, con una tarrina de queso Philadelphia, 75 g de mantequilla derretida y 1 cucharadita de extracto de vainilla. El sabor es delicioso y tiene una textura irresistible.

De sabor está deliciosa, el bizcocho tiene un punto riquísimo! Y que bien combina con el frosting!

Por cierto, ¿os habéis fijado en mi soporte para tartas? Pues es home-made! Bueno más bien Zara Home-Made! :)

Llevaba bastante tiempo detrás del clásico soporte blanco, pero no lo encontraba por ningún sitio. Así que ya estaba buscando por internet, y los gastos de envío me echaban mucho para atrás. Hasta que el miércoles me pasé por Zara Home a ver si encontraba algo y en la sección de menaje infantil vi unos platos de plástico con sus vasos a juego monísimos y pensé: ¡Ya tengo soporte!

Blanco justo no los había, pero sí rosita claro y queda también chulísimo! Sólo hay que poner el vaso boca abajo y el plato encima y aunque no os lo creais tiene muchísima estabilidad! Mi idea inicial era pegarlo todo, pero al ver que aguantaba tan bien pues lo dejé tal cual, así se lava y se guarda con mucha más comodidad.

Así que si queréis un soporte chulo para vuestras tartas pasaros por Zara Home. Los hay de muchos colores y lo mejor es el precio, me costó en total 5 euritos!

Os recuerdo que mañana día 20 es el último día para que presentéis vuestras aportaciones al evento Mami, Papi...Yo También que este mes corre a cargo de Dina desde su blog Dulces Suspiros. Así que aún estáis a tiempo de preparar unas ricas galletas con vuestros minichefs.

Y por último recordaros que tenéis hasta el 15 de Marzo para enviarme la receta de vuestro dulce americano favorito para el concurso U.S.A y hasta el 1 de Abril para contarme cual es vuestro postre favorito para participar en el sorteo del Larousse de los Postres!

Os voy a marear con tanta fecha! :)

Nada más por hoy.

Un besote enorme!